Son Fiol
Cuando el joven March estaba a punto de consumar su enlace matrimonial con la rica heredera
Leonor Servera Melis, llevo a cabo una jugada maestra de ingenio mediante la cual convenció a
su padre para que le donara la mayor de sus propiedades rústicas (Son Fiol), y a su suegro le
convenció para que le entregara una gran cantidad de dinero en efectivo metálico.
El modus operandi fue el siguiente:
-El joven March se entrevista con su suegro y le dice mi padre le va a regalar a su hija y a mí,
la casa que le ha costado 60.000 pesetas (en realidad le había costado 30.000 pesetas, además era
falso que se la regalara, la recibió en herencia a la muerte de su padre en 1937). Pero este
embuste obligó a su suegro a entregarle 60.000 pesetas en efectivo para igualar la dote.
-Entonces el joven March acude con el botín a su padre y le enseña el manojo de billetes que le
había entregado su suegro, diciéndole: mi suegro me ha regalado 60.000 pesetas, el doble de lo
que vale la casa que usted ha construido para mí y Leonor, y me ha pedido que usted aporte la
diferencia como dote nupcial para igualar su donación, entonces el viejo March le contesta a su
hijo: Juan tú sabes que he gastado todo el efectivo en la casa, no tengo más dinero, entonces su
avispado hijo le contesta, si a usted le parece bien podría poner a mi nombre Son Fiol y así
Leonor le podrá decir a su padre que usted ha igualado su dote. El viejo March accedió y nuestro
protagonista consiguió con esta ingeniosa operación 60.000 pesetas en efectivo y la propiedad de
Son Fiol que utilizó como garantía para que los bancos le abrieran una línea de crédito.
Detalle del rótulo que aparece en la entrada. (Colección Can Verga)