Cuando se daba importancia al hecho de que el Sr.
March conociera ciertos detalles, yo decía: «Qué de
particular tiene que lo sepa, si somos veintiuno y
con media palabra un periodista tiene suficiente para
figurarse, aproximadamente, lo sucedido; y si hay
una persona que está procesada y sabe quien hay en
la Comisión y conoce perfectamente que le han
hostilizado anteriormente y , sin ninguna delación,
poniéndose en lo peor, no necesita ser profeta para
saber que, estando encartado, algunos de los que
estaban en la Comisión pudieran intentar
detenerle?.
Antonio Royo Villanova, 1931
Diputado de la Comisión de Responsabilidades.
(Las facetas proféticas de March, tenían mucho que ver con su talonario.)